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Vie, May

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En Gobernador Gregores los empleados municipales realizan un acampe en reclamo de condiciones laborales y salarios al mismo tiempo manifestaron que Vázquez abandona el barco antes de que se hunda, haciendo referencia a la próxima asunción del actual intendente como Diputado Nacional

A poco menos de una semana de jurar formalmente ante el Congreso de la Nación, el Intendente de Gregores se ve frente a un conflicto con un sector de trabajadores municipales que, producto de la pérdida adquisitiva de su salario en sus 14 años de gobierno y el brutal ajuste impuesto por el gobierno nacional (con complicidad del FpV), deciden llevar a cabo un acampe fuera del Corralón municipal (el corazón del municipio) asumiendo que quien debe responder por sus condiciones laborales y de salario, abandona el barco antes de que éste se hunda, avizorando que no habrá discusión salarial, ni bono navideño o de fin de año.

A la cabeza del reclamo se encuentra ATE, que viene llevando a cabo un plan de lucha a nivel provincial por recomposición salarial para los empleados públicos (esta semana un paro por 120 horas), y que hace años se encuentra luchando por el reconocimiento para los municipales de Gregores que requieren la herramienta gremial ya que SOEM – a cargo de Mateo Velásquez- los ha sometido al hundimiento de sus condiciones.

Actualmente los trabajadores y obreros municipales tienen, en la mayoría de los casos, salarios de pobreza, donde el que posee el modulo más bajo (gran parte) promedia los $12.000. Recordemos que el salario mínimo para no estar por debajo de la línea de pobreza se encuentra en los $15.676, de acuerdo a lo estipulado por el INDEC.

Luego de sus 20 días de “vacaciones”, con una crisis que raja las paredes en la Provincia, la Gobernadora de Santa Cruz pasó por la Casa Rosada y firmó el pacto fiscal frente a Frigerio, Peña y hasta el propio Macri, como parte del plan de ajuste que traerá con él la reforma laboral, impositiva, jubilatoria y educativa, agravando aún más la situación para el postergado sector. Con subas en tarifas de combustible, luz y gas se hace imposible pensar que los municipales de Gregores puedan soportar las condiciones impuestas por el intendente, ya que al día de la fecha no atendió el reclamo y además exige que se levante la medida para abrir el “diálogo”.

El apuro por asumir la diputación deja ver cuáles son las prioridades del FpV, los trabajadores tuvieron una primera instancia de conversación con Héctor Vidal a cargo de la intendencia, quien aspira a quedarse en el cargo una vez que Vázquez asuma como diputado; la respuesta del actual edil no fue para nada alentadora, ya que dijo estar incapacitado para dar una solución al conflicto. Los trabajadores deben esperar la jura de Vázquez en el congreso para que a su regreso decida si los atenderá. La crisis del FpV para atender el ÚNICO conflicto del año demuestra el grado de descomposición del aparato de gobierno, incapaz de dar una salida a sus trabajadores, deseoso de acaparar más poder, impunemente les da vuelta la cara. Y el empantanamiento llega al punto de no resolver si quiera para garantizar mínimamente la recolección de residuos por un lado, y la movilidad que requieren las delegaciones que dependen del colectivo municipal; todos vehículos que se encuentra en el corralón, inactivos hasta que se atienda el reclamo.

Los municipales de Gregores y del resto de Santa Cruz, deben tener un aumento de emergencia y conquistar la paritaria salarial para poner fin a los contratos basura, contar con el pase a planta de todos los contratados, recuperar la carrera municipal con recategorizaciones y jubilación digna, para lo cual deben contar con una organización independiente, dispuesta a ir a fondo con un plan de lucha y hacer frente a la avanzada del gobierno.