En una reunión con vecinos, funcionarias municipales anunciaron mejoras viales, nuevos espacios verdes y un programa para frenar los minibasurales con participación barrial.
La reunión tuvo amplia concurrencia y no fue solo para la foto: se habló de calles intransitables, anegamientos recurrentes, basurales clandestinos y la falta crónica de espacios de encuentro como plazas y canchas. El presidente de la Junta Vecinal, Raúl Burgos, llevó un mapa con los puntos críticos y agradeció la reciente mejora vial: “La pasada de la máquina cambió mucho la transitabilidad, pero aún falta”.
Los vecinos coincidieron en reclamar una cancha de fútbol y una plaza como espacios indispensables para la integración social. “Nuestros chicos no tienen dónde jugar y eso también es seguridad”, soltó una vecina.
Quiroz e Inostroza informaron que el barrio forma parte del plan de mantenimiento vial que se ejecuta en toda la ciudad, y que ya se están revisando proyectos anteriores para retomar la construcción de la plaza. La propuesta de la cancha será evaluada con prioridad.
Además, se discutió el programa “Vecinos Protectores”, que busca involucrar activamente a los habitantes para frenar la proliferación de minibasurales y hechos que atentan contra el orden público. “Queremos que el barrio sea parte de la solución, no solo de la denuncia”, explicó Inostroza. La idea generó adhesión inmediata entre los presentes, que se ofrecieron a colaborar.
La reunión cerró con un acuerdo tácito: replicar este tipo de encuentros en otros barrios para que la planificación urbana no se decida desde una oficina, sino desde el territorio. “La ciudad se construye entre todos”, sintetizó Quiroz.
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