fbpx
28
Jue, Ago

Educación

Docentes y no docentes exigen de Argentina mejoras salariales y más presupuesto, tras la media sanción de la ley que incrementa recursos para las universidades nacionales.

El inicio del segundo cuatrimestre en gran parte de las universidades nacionales se verá interrumpido este lunes por un paro docente y no docente convocado bajo la consigna “basta de salarios debajo de la línea de pobreza”.

La medida, impulsada por la Federación Nacional de Docentes Universitarios (CONADU), se inscribe en un reclamo que va más allá de lo salarial: exige financiamiento para gastos de funcionamiento y un aumento del presupuesto destinado a ciencia y tecnología.

En algunas casas de estudio, el cese de actividades será solo por 24 horas, mientras que en otras —como la Universidad Nacional de La Plata— se extenderá durante toda la semana. En la Universidad de Buenos Aires, el paro se realizará este lunes, pero las clases se retomarán el martes con acciones de visibilización del reclamo.

Un aumento irrisorio y diferido

La tensión escaló luego de que el Poder Ejecutivo definiera por decreto un incremento salarial para el sector docente universitario de 1,3% en junio, 1,3% en julio, 1,3% en agosto, 1,2% en septiembre, 1,1% en octubre y 1,1% en noviembre. La mayor parte de estos montos se pagará de forma diferida, acumulando los porcentajes de los primeros tres meses para abonarlos recién con el sueldo de agosto.

Ajuste acumulado

Un informe de la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) advierte que el presupuesto universitario 2025 será 9% menor en términos reales que el de 2024, y acumulará una caída del 32% desde 2023. Para la organización, este ajuste compromete seriamente la capacidad de las universidades de garantizar educación pública, gratuita y de calidad.

Impacto y continuidad

La huelga coincide con el debate legislativo sobre la media sanción de la ley que incrementa los recursos para las universidades. Sin embargo, las fechas de regreso a clases dependerán de la conflictividad interna en cada institución y del grado de adhesión a la medida.

En este contexto, la conflictividad universitaria se proyecta como uno de los focos de tensión política y social de la segunda mitad del año, con el inicio del calendario académico de miles de estudiantes condicionado por la protesta.

Si llegaste hasta acá tomate un descanso con la mejor música